.CONSEJOS SOBRE RUEDAS.

Por: Fabián Matías Rossi

Tema: ¿Qué mirar a la hora de comprar un auto usado?

PRÓLOGO:

Creo que ya está de más comentar q vivimos en una sociedad cada vez más consumista, donde la gente está desesperada por adquirir productos que nos venden la fórmula de la felicidad. Conocidos son los casos de personas que han pagado sumas excesivas, después de hacer largas colas para ser los primeros en comprar un i-phone u otros productos de la llamada "tecnología descartable". Parece ser que, en actualidad, la tecnología ya forma parte de la vestimenta de la gente. Así como es impensado salir a la calle sin ropa, se han agregado en estos últimos años, los celulares...cada vez más tecnológicos y con más aplicaciones...más allá de los motivos por los cuales fueron concebidos inicialmente. Hoy por hoy estos aparatitos son mucho más q un simple teléfono...

Y en ese marco también se encuentran los autos; donde ya es sabido q en los últimos años se impuso con mucho éxito la fórmula de la "pre-venta". Impensable años antes, pero q logra su fin con mucha eficiencia, impulsada por la necesidad de la gente de pertenecer al pequeño grupo q accede a adquirir una novedad, casi de manera exclusiva (y no tan "exclusiva" en algunos lanzamientos recientes...).

En todos esos casos, nos estamos refiriendo a compras IRRACIONALES donde lo q predomina es el deseo y los impulsos por sobre el sentido común. Pero todo tiene un límite en la vida, y muchas veces los impulsos nos pueden llevar a cometer decisiones equivocadas. Por eso acá va una guía RACIONAL para la compra de un auto usado.

• ¿Cuántas veces nos compramos algo y tiempo después nos "aburrimos" de él o recibimos un regalo de algún allegado y nunca le encontramos una utilidad?. Para tratar de evitar un desenlace similar podemos dividir el proceso en tres etapas. La primera; definir el SEGMENTO del auto q necesitamos comprar. La segunda el MODELO q más se adapta a nuestras necesidades y la tercera; consejos simples para evitar ser ENGAÑADOS."

USANDO EL SENTIDO COMÚN

¿Cómo definimos el SEGMENTO del auto? Parece bastante obvio, pero en muchos casos no es tan así. Lo principal es ubicarnos en nuestra propia persona, tener en cuenta el uso que le vamos a dar y los requisitos que pretendemos de un vehículo. Esas características dependen de muchísimos factores como la edad, la condición civil, lugares por donde se lo va a usar, kilometraje anual... hasta, incluso, el tamaño del garaje.

Una persona soltera, joven y sin familia a cargo puede prescindir de la capacidad de carga y en ese caso un auto compacto del segmento A o B con carrocería de 3 puertas funcionaría bien. Caso similar, si fuese un segundo auto de uso netamente urbano, donde el auto se usa en trayectos cortos y sin demasiada carga a bordo.

Si el auto se usa para transportar cosas de gran tamaño, como pueden ser instrumentos musicales, es mucho más conveniente un auto con carrocería bicuerpo que un tricuerpo; ya q al abatir los asientos se genera una mayor capacidad de carga, que es más practico para cargar y descargar, ayudando a evitar que las cosas puedan llegar a golpearse y arruinarse.

Otro dilema interesante es entre una Rural y un Monovolumen; tan parecidos y tan diferentes. Para las personas q no necesiten transportar mucho equipaje, indudablemente, el Monovolumen es más practico; ya q le ofrece un "plus" de versatilidad, acompañado de una gran habitabilidad y una posición de manejo alta que favorece la visibilidad (un factor muy tenido en cuenta por el público femenino).

Para un uso dual de trabajo y familia, una buena opción para tener en cuenta son los "utilitarios familiares" como Kangoo o Berlingo, que combinan la practicidad de un Monovolumen con la capacidad de una Rural, aunque en detrimento de las prestaciones.

Por otro lado, en los últimos años se han puesto muy de moda las pick ups doble cabina. En parte, por que han dejado de ser una simple herramienta de trabajo para convertirse en un símbolo de status aspiracional para mucha gente. Lo cierto es que estos vehículos cada día se parecen más a un SUV, ya que las diferencias de confort son mínimas. Sólo podemos mencionar que las pick ups, por ser un vehiculo de trabajo cuentan con una suspensión trasera de eje rígido que provoca ciertas incomodidades cuando se transita con la caja de carga, descargada; por lo cual es recomendable usarlas con unos 200 Kgs de lastre para disminuir ese efecto.

Los SUV y TT han pasado de ser vehículos para un uso casi específico, para transformase en vehículos familiares por excelencia y una fuerte alternativa frente a los Monovolúmenes de mayor tamaño. Eso hace que actualmente casi todos los modelos ofrezcan versiones de tracción simple, destinadas a un uso netamente urbano. Sin olvidarnos de los Crossovers o las SUV deportivas, productos más cercanos a un auto que a una "camioneta".

Con todo esto analizado, claramente una persona joven y soltera cuenta con menos requisitos para comprar un auto. Por lo cual, más allá del presupuesto, podría comprar por placer un modelo de cualquier segmento. Pero nuevamente hay q ubicarse en la necesidad de cada uno; ya q por el mismo dinero, en el mercado de usados, muchas veces podemos encontrar un auto mediano fabricado en el Mercosur bastante actual, al mismo precio de un importado de alta gama o una pick up doble cabina. La cuestión, es evaluar si vale la pena pagar un costo de mantenimiento tan elevado por un producto que no está acorde a nuestro bolsillo.

También es cierto que muchos productos importados con más de 10 años de antigüedad, ofrecen equipamientos de seguridad como airbag o ABS. Pero también hay q tener en cuenta q esos dispositivos requieren de cuidados...y, en algunos casos, es probable que con el correr de los años hayan caído en manos de personas que no contaban con los medios suficientes como para hacerles el mantenimiento necesario que esas partes demandan. Pero ese es un tema que vamos a tratar más adelante.

DEPENDE DEL USO

Una vez que ya pudimos definir el SEGMENTO del auto que necesitamos, el paso siguiente es elegir el modelo más conveniente. Lo principal es tener en cuenta el kilometraje que le vamos a hacer. Si compramos un auto relativamente nuevo y/o con poco uso y habitualmente recorremos menos de 20.000 km anuales, el costo de mantenimiento no es un factor para tener en cuenta, ya que en ese período mayormente vamos a hacer mantenimiento preventivo (los services de rutina). Y, en ese caso, podemos priorizar otros aspectos como el equipamiento, el confort de marcha, la tenida en ruta o la estética e imagen del modelo... casi, como si se tratara de un 0 km.

Cuando compremos vehículos más viejos o con alto kilometraje (especialmente, si son vehículos de trabajo), hay que tener en cuenta que esos vehículos ya recibieron reparaciones y la confiabilidad de la unidad depende de la calidad con que esos trabajos fueron realizados. Hay talleres que no cuentan con el personal ni las herramientas adecuadas; pero también es cierto que muchas veces el propio dueño exige reparaciones "baratas" y sin garantía...con las consecuencias imaginables.

Ese tipo de problemas suelen aparecer en algunos vehículos de alta gama que, con el correr de los años, caen en manos de propietarios q no cuentan con los medios económicos necesarios para mantenerlos y no pueden evitar el deterioro de la unidad.

También hay que tener en cuenta que si compramos un vehículo del que circulan pocas unidades en las calles (sea nacional o importado) es probable que tengamos problemas para conseguir repuestos, especialmente si son piezas de carrocería, donde es casi imposible "adaptar" una puerta o panel de otro modelo. En algunos casos nos podemos llegar a encontrar con autos muy reformados, con partes mecánicas de otros modelos que no fueron diseñadas para tal fin. Un caso conocido fue el de las coupé Mazda RX-7 con motor rotativo; donde se gastaban los sellos del rotor y el costo de reparación era muy elevado (para colmo, en los ´80, la importación estaba cerrada) y en casi todos los casos se les cambió el impulsor por otro convencional, por lo general, de origen nacional.

En todos los casos siempre tenemos que priorizar el estado de la carrocería, ya que todas las piezas mecánicas (incluso el motor) pueden repararse e intercambiarse sin problemas. Pero una carrocería deteriorada o mal reparada, se transforma en un problema muy grave y de difícil solución. En algunos casos, los daños llegan a ser irreversibles, como cuando se arma un auto completo sobre una estructura torcida. Además, un choque mal reparado hace disminuir muchísimo la rigidez estructural...y en caso de un accidente, la carrocería no va a absorber el impacto correctamente y se va a deformar más de lo previsto.

CONSEJOS UTILES

Vamos a suponer que ya estamos frente al modelo que queremos comprar y éste ya cuenta con la correspondiente documentación en regla. Si el auto no cuenta con la documentación obligatoria para su transferencia asesórese bien, por que puede estar comprando un problema, en algunos casos, con consecuencias graves (documentos falsos, pedidos de captura, prendas, etc). Muchas veces no vamos tener la "bendición" de conocer personalmente y con anterioridad al dueño y no vamos a saber de antemano como fue tratado y mantenido el auto, por eso siempre es bueno tener algún mecánico de confianza que nos pueda dar una mano para revisar la parte mecánica. Pero fuera de ello, hay muchas cosas que se pueden revisar sin tener conocimientos técnicos, y que nos pueden ayudar a detectar un engaño.

A continuación, los pasos a seguir para mirar un auto usado. Vamos a empezar desde lejos hasta ir acercándonos lentamente en los detalles. Siempre hay que tratar de buscar lugares al aire libre y con mucha luz; evitemos revisar autos de noche o en lugares cerrados con poca luz donde es más difícil poder apreciar los detalles e imperfecciones.

- Con el auto estacionado tenemos q mirar desde lejos ambos laterales para ver si hay distintos colores en la chapa, prestando atención a que las líneas de la carrocería estén parejas. Luego debemos repetir la operación con la trompa y la cola respectivamente, y desde esa misma posición echar otra mirada a los laterales...en esta posición podemos detectar el encuadre de la carrocería, siempre comparado entre ambos lados, para detectar si el auto tuvo un choque grande o un vuelco que haya dañado severamente la estructura. Si la chapa tiene ondulaciones o golpes, ésta también es la mejor posición para detectar ese tipo de defectos.

- Acerquémonos al coche y miremos el brillo y porosidad de la pintura, buscando de que sea uniforme en todo el auto. Un mal trabajo de pintura se puede deteriorar fácilmente. Observemos bien los zócalos y pisos; si el auto fue reparado en ese sector, suelen quedar rastros del trabajo. También tenemos que mirar la manera en como hermanan las diferentes partes de la carrocería entre sí, como ser las puertas con sus respectivos marcos, tapa de baúl, paragolpes, etc. Si estas partes no están bien alineadas, probablemente estemos ante un coche mal reparado. Prestemos atención al estado de las ópticas y plásticos en general para ver si alguno de estos elementos fue cambiado recientemente. Si el auto tiene ópticas y algunos plásticos nuevos, puede ser indicio de alguna reparación...si el auto tiene ópticas de policarbonato (plásticas) tenga en cuenta que el calor de las luces (obligatorias para circular en ruta) las hace envejecer rápidamente y se ponen opacas, por lo cual su estado debe ser acorde al kilometraje del auto. Es aconsejable mirar el estado de los burletes de las ventanillas y los elementos de las suspensiones...si están salpicados con pintura, ese auto fue reparado.

También es importante observar el estado de los neumáticos, ya que en ellos se puede apreciar el cuidado que se le dio a la unidad. Las cuatro ruedas tienen que ser iguales, si el auto tiene neumáticos de diferente medida es síntoma de descuido y probablemente sean ruedas usadas. Observe que el estado de las ruedas sea uniforme, un desgaste excesivo o desparejo es síntoma de falta de mantenimiento. Si el auto tiene pocos kilómetros corrobore esa información mirando la rueda de auxilio, si el neumático está desgastado y es de otra marca, podemos estar frente a un engaño.

- Pasemos a observar los interiores del auto. Miremos el estado de los tapizados, alfombras, etc. Siéntese en todos los asientos para comparar el estado general de los mismos. Un detalle FUNDAMENTAL para tener en cuenta, y que es uno de los principales testigos de kilometraje del auto, es observar el estado del volante, pomo de la palanca de cambios y pedalera. Su desgaste debe ser parejo; si nos encontramos con un auto que tiene un volante y un pomo "nuevos" con una pedalera muy desgastada, puede ser un síntoma de alto kilometraje.

Miremos el estado del baúl, prestando atención a posibles ralladuras o abollones que denoten descuido.

En todos los casos, siempre miremos las partes internas de la carrocería para detectar reparaciones, cuando abramos las puertas, capot, baúl, etc.

- ¿Como mirar la parte mecánica? La mejor forma es probándolo; no se confíe con ver un impulsor reluciente, un motor demasiado limpio puede ser un síntoma de una "lavada de cara".

Una vez que pongamos en marcha el auto, comprobemos q todas las partes eléctricas funcionen correctamente (aire acondicionado, levantavidrios, cierre centralizado, luces, etc). Cuando arranquemos, hagámoslo de manera muy suave para detectar posibles "tironeos" en el embrague que denoten desgaste. Durante la marcha nunca encienda la radio ni ningún otro elemento que pueda interferir para detectar posibles ruidos de funcionamiento, en especial si provienen del impulsor. Para detectar el desgaste de las suspensiones no hace falta someter severamente el auto a los pozos, trate de usarlo normalmente, y de esa forma va a apreciar mejor el estado de las mismas. Pruebe el tacto del pedal de frenos, para ver su respuesta y, en frenadas un poco más exigidas, ver el estado de los amortiguadores. Si el auto tiene ABS, tome un poco de velocidad y frene a fondo para comprobar que el sistema funcione correctamente (transmitiendo las vibraciones en el pedal). En los autos con mayor antigüedad, podemos revisar el estado de la caja de velocidades moviendo la palanca rápidamente cada vez que cambiemos de marcha para detectar síntomas de desgaste. Otro método es circular en tercera velocidad a un ritmo moderado (unos 40 km/h) y rebajar ágilmente a segunda velocidad para comprobar que los cambios no "canten". Para hacer esta prueba no hace falta someter el vehículo a un manejo deportivo innecesario; siempre maneje con calma para poder prestar la mayor atención posible al estado del auto.

Con el auto parado, tire del freno de mano e intente arrancar para comprobar q funcione correctamente.

Si necesita revisar un vehículo más profundamente, como pueden ser otras partes mecánicas específicas o el caso de los airbag que tienen una vida útil determinada por el fabricante, va a tener que acudir a profesionales idóneos. Siempre es recomendable que un profesional revise el auto antes de comprarlo. Pero estos consejos, le van a servir para detectar más fácilmente a vehículos en mal estado y sin necesidad de visitar un taller para ello.