domingo, 24 de junio de 2012

.HISTORIA SOBRE RUEDAS.

Esta semana: FIAT TOPOLINO.

Para trabajar y divertirse...



En 1936, un año después del nacimiento del 1500, Fiat presentó otro auto revolucionario, el Fiat 500 popularmente bautizado "Topolino". El árbol genealógico del 500 se remonta a 1915 con un primer prototipo y un segundo en 1919 con motor de 760 cm3. Otros estudios fueron realizados en Fiat entre 1920 y 1933, pero solo al año siguiente parece propicio el momento de lanzar el "autito para el trabajo y la distracción".

Proyectado por un grupo dirigido por Antonio Fessia y Dante Giacossa, el primer requisito que se debía obtener era el poco peso, al cual se debía llegar reduciendo las dimensiones generales, particularmente la distancia entre ejes y las trochas, pero esto no debía implicar reducir la habitabilidad. Los asientos situados equidistantes de los ejes de las ruedas, con evidente beneficio del confort de marcha, permitían utilizar al máximo el largo de la carrocería; vale decir que los mismos fueron ubicados adelante respecto de la posición que ocupaban comúnmente en los autos de dos plazas.

 Esto obligó a trasladar más adelante también en el motor que fue montado en una original posición. Parece ser que el Topolino fue ideado en realidad como un tracción delantera; eso explicaría la ubicación del radiador por detrás del motor y la suspensión delantera a ballesta transversal semieliptica, la más apropiada para no interferir con los semiejes oscilantes.

El chasis estaba compuesto por un robusto travesaño que soportaba el motor y en el cual se concentraban los esfuerzos principales, sobre todo las reacciones de la dirección y la suspensión, de modo que la única tarea que le quedaba a los livianos largueros, era la de soportar exclusivamente el peso de la carrocería.
El interior no era de dimensiones muy generosas, pero dos personas de talla superior a la media podían viajar cómodamente, mientras que en la parte trasera quedaba un amplio espacio para el equipaje.

El auto era muy bajo y esto comprendía también la altura del centro de gravedad conformando una característica considerada como valioso factor de estabilidad en curvas. Con la nueva dirección, la suspensión delantera a ruedas independientes y la racional distribución de pesos, fue resuelto el problema de la tenida de ruta a cualquier velocidad.

Disponía de una caja de cuatro velocidades y los frenos eran hidráulicos. La carrocería era muy aerodinámica, completísima en accesorios y las prestaciones brillantes.
El motor era un cuatro cilindros en línea de válvulas laterales de 570 cm3 de cilindrada con la tapa de cilindros en aluminio y desarrollaba una potencia de 13 CV a 4.000 rpm.
Se presentó en dos versiones: "transformabile" (descapotable) y berlina. El parabrisas y las ventanillas laterales de grandes dimensiones permitían máxima visibilidad.

En 1948, se modificaron la carrocería y el motor adoptando la denominación 500-C. Además de la berlina, era interesante la versión "giardiniera" que representa uno de los primeros ejemplos de pequeña station-wagon. En el motor se adoptó la posición de válvulas a la cabeza.
Una profunda transformación del popular 500 se produce en 1949 con el modelo C fundamentalmente renovado en la carrocería y mejorado en la mecánica.

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